Restaurante Som Thai: ¿has comido ya en un tailandés?
Un tailandés nunca te preguntará «¿cómo estás?». Soltará: «¿has comido ya?», aunque te sonará algo así: «Kin Kao ruyang?». Si la respuesta es que no has comido todavía, date una vuelta por Som Thai. Es un acogedor rincón de este país asiático en el corazón de Chueca. Un restaurante discreto de buena cocina y ambiente relajado.
La gastronomía tailandesa es tendencia en las grandes capitales europeas y se está haciendo su hueco en la compleja oferta internacional de Madrid. Tiene una base picante que equilibra con aromas florales y paladares ácidos, agrios, salados y dulces. Coco, curry, pimientos (unos pican y otros no), arroz y pollo son, quizá, los cimientos de una cocina diversa que juega con las formas, los colores y los sabores. ¿Lo más importante de cada plato? La armonía.
Gema y Michelle son las responsables de la armonía en Som Thai. Por cierto, en poco más de un año se ha convertido en una referencia para los amantes del picante. Ellas se conocieron en el mítico Thai Garden de Jorge Juan, rodaron a Valencia para presentar el concepto tailandés y volvieron a Madrid con ganas de algo nuevo. Gema te recibe con una sonrisa y Michelle, que es de Tailandia, fluye como un monzón entre las mesas. En la cocina tienes un potente equipo tailandés y filipino.
Som Thai se abastece de productos típicos del Oriente Lejano, pero también de ingrediente nacional fresco y de calidad. Sorprende, por tanto, que una cocina tan elaborada y con una base saludable sea buena, bonita y barata. Tienes un menú degustación por 25€, uno de medio día de 12,80€ y uno de fin de semana de 16,80€.
Fuimos con el plan habitual: «lo que quieras que probemos, lo probamos». Es importante que te dejes asesorar en cuanto al picante. A nosotros nos chifla, pero para gustos, paladares. Hicimos bien en confiar en Gema, en cualquier caso.
La experiencia Tailandesa comenzó con un Kai Satte, finas brochetas de pollo marinado (suave y terso) en leche de coco y hierbas a la parrilla. Bien para abrir boca, porque después llegó una Som Tam, deliciosa ensalada de papayas verdes con cacahuete y colas de langostinos y un aliño de zumo de lima. La aventura oriental siguió con el plato estrella de la casa.
Som Thai tiene una clientela especial y muy variada, donde abunda el extranjero. Sabemos que hay gente que viene de fuera de Madrid para probar su Pad Thai. Nosotros lo haríamos. Es un plato fantástico a base de tallarines de arroz con huevo, salsa de pescado, verduras frescas, cacahuete y un picante suave, entre otros ingredientes. Gema nos confirma que la receta exacta es secreta.
Cuando nos llega el Kaeng Keaw Wan Kai, tiernas tiras de pechuga de pollo al curry verde con verduras, empezamos a estar llenos, pero no nos importa. Este plato, algo picante y sabroso, viene acompañado de un buen arroz tailandés. Es una buena forma de crear los cimientos necesarios para… ¡el postre!
Un buen postre es el equilibrio perfecto para una comida de primera. Es una necesidad, un cierre obligado, un remedio para el viaje picante. Som Thai tiene un pudin de tapioca de rechupete. Bolas de gelatina con leche de coco y sésamo. Juguetonas en la boca y dulzonas al paladar. Una buena forma de terminar este viaje al otro lado del mundo sin salir de Chueca. Date un garbeo y luego nos cuentas qué tal.
Los datos. Som Thai. San Marcos, 26. Miércoles a lunes, de 13:30-16:30 y 20:30-24:00 horas. Web.
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