Taramara, guisos y tacos conviven para impresionar
Todos necesitamos guardar en la recámara un restaurante para impresionar. Salimos a cenar con amigos y nos encanta el bar más moderno pero hay otras citas que necesitan otros marcos. Taramara es ese restaurante al que llevar a tus suegros, tus padres, tu jefe en el que ellos se van satisfechos y tú disfrutas de lo lindo. Porque la decoración es sobria y les va a encantar, porque ellos van a encontrar esas referencias de cocina tradicional sin las que no saben salir de casa y tú te vas a relamer con el expertise asiático fusión de dos hermanos cocineros que no dejan indiferente a nadie. Al final, un postre de altura pone el broche perfecto a una comida de calidad, tradicional pero con mucho guiño actual y en un entorno en el que estar a gusto en cualquier momento especial.
Taramara (que no significa nada, por cierto, solo es un juego de sílabas sonoras) es el tercer proyecto común de Sergio y Roberto Hernández, dos hermanos cocineros de lo más inquieto. Aunque su formación gastronómica comenzó en Madrid, con Rogelio Barahona de Urkiola Mendi, ambos pasaron más de ocho años viajando y cocinando, cada uno hacia una punta del globo. Singapur, Filipinas, Azerbayán, Perú…
Ambos apostaron todo por su pasión hasta que un proyecto en Singapur no salió como esperaban. Volvieron a España al llamado de un amigo con el que montaron La Chusquery, en La Latina pero necesitaban desarrollarse más y cambiar de zona de actuación. Nació Latasia, como su casa de comidas, su espacio de creación y su lugar donde viajar a través del paladar a zonas geográficas que ellos han conocido en profundidad, sobre todo desde sus cocinas. Sin embargo, son inquietos, como ya he dicho y espoleados por otro socio, empezaron a pensar en más proyectos. La casualidad quiso que una clienta de Latasia tuviera un local amplio y luminoso en el Campo de las Naciones. Y llegó Taramara.
«Taramara era una vuelta a nuestras raíces, a la tradición culinaria más auténtica y arraigada, a los guisos y las materias primas», me explica Sergio. Pero la fama que arrastran de Latasia (que está siempre lleno) les persigue y al final, Taramara ha adoptado platos de Latasia en su carta. Así, junto al arroz meloso con panceta, las mollejas, las croquetas, los pescados y las carnes, conviven los tacos al pastor, el tartar de zamburiña, el saam de panceta, los estofados al curry verde y lo más especial de Latasia: la ensaladilla rusa y el ceviche. Todos encontrarán un plato que les convenza y enamore, desde el más clásico al más arriesgado. Y postres como la tarta de queso, la de chocolate o la increíble torrija de brioche pondrán de nuevo a toda la mesa de acuerdo.
Si prefieres una opción más casual, de aperitivo, apúntate a la carta de la barra, disponible a cualquier hora. Son bocaditos curiosos y pensados para compartir que hacen un guiño a la fusión, como por ejemplo el bao de pollo o el pepito de ternera servido en mantou (un panecillo al vapor típico del norte de China). De martes a viernes, también se ofrece un plato de cuchara que cambia a diario.
La decoración es obra de la firma madrileña de interiorismo Lab Matic Estudio que demuestra que en
Taramara la modernidad no está reñida con una cocina de corte tradicional en un espacio acogedor y apetecible. Pensado para el disfrute en horario flexible y de clara inspiración retro, el local se estructura en tres zonas distintas. La zona central, en la que funciona la carta de bar, cuenta con una serie de
mesas comunales altas de acabados básicos, sólidos e incluso toscos. El salón principal por su parte está
decorado con muebles originales de los años sesenta, una chimenea y madera de nogal evocando el
ambiente de los clubes privados de mediados del siglo pasado mientras que el tercer salón parece una terraza abierta todo el año, con luz natural, mimbre, vegetación y suelo hidráulico.
Ponte la medalla y elige Taramara para el próximo encuentro especial que tengas en mente. Ya verás como triunfas y además, lo disfrutas.
Los datos. Taramara. Avenida de los Arces, 11 (Campo de las Naciones). Horario: martes a jueves de 13.00 a 24.00 h. Viernes, sábados y vísperas de festivos de 13.00 a 1.00h. Domingos y festivos de 13.00 a 16.30h. El restaurante cierra la cocina entre las 16:30 y las 20h. Teléfono: 91 058 11 21. Precio medio: 35-40€ (restaurante) y 15-20€ (bar).
No Comments